Seguro de incapacidad laboral: Cómo proteger tu capacidad laboral
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- El seguro de incapacidad laboral es uno de los seguros no obligatorios más importantes. Garantiza el sustento en caso de incapacidad laboral.
- Sobre todo, para los trabajadores por cuenta ajena que dependen de sus ingresos, el seguro de capacidad laboral es una buena idea. Los estudiantes también pueden beneficiarse de este seguro.
- Entre los motivos más comunes de incapacidad laboral se encuentran las enfermedades mentales.
- Cuanto antes contrates una póliza de incapacidad laboral, más bajas serán las primas mensuales.
¿Qué hacer si no puedes trabajar de un día para otro? Puede ocurrir rápidamente: un accidente o una enfermedad repentina y ya no puedes hacer tu trabajo. Puedes protegerte de las pérdidas económicas con un seguro de incapacidad laboral. Te enseñamos qué incluye el seguro de invalidez y cuándo te conviene.
Perder el trabajo es un riesgo que a menudo se subestima. Si de repente te encuentras sin ingresos regulares, el riesgo de ruina financiera es grande. Con un seguro de incapacidad laboral puedes minimizar este peligro.
¿Qué es el seguro de incapacidad laboral?
El seguro privado de incapacidad laboral es un seguro no obligatorio. Es especialmente útil e importante si dependes de tus ingresos mensuales. Si ya no puede trabajar por motivos de salud, el seguro te paga una pensión mensual. Con ello, aseguras tu existencia económica.
Pero, ¿en qué momento estás oficialmente incapacitado para trabajar? En la mayoría de los seguros, estarás oficialmente incapacitado cuando no estés en las condiciones aptas para realizar las funciones habituales en tu puesto de trabajo. Un ejemplo sería si sólo puedes trabajar unas horas al día. Si se cumplen estas condiciones, la compañía de seguros te pagará una pensión de invalidez mensual. Por regla general, la recibirás mientras dure tu incapacidad laboral, como máximo hasta la duración acordada en el contrato.
¿Quién necesita un seguro de incapacidad laboral?
La conveniencia de un seguro de incapacidad laboral depende de muchos factores, como tu profesión, tu edad, las posibles enfermedades preexistentes o tu estado civil. Sin embargo, si vives de tus ingresos y no tienes reservas para cubrir tus gastos de subsistencia o para financiar a tu familia, un seguro de incapacidad laboral privado tiene sentido y es necesario. El seguro es especialmente útil para las siguientes personas:
Como alternativa al seguro privado de incapacidad laboral, por ley tendrás derecho a una pensión por incapacidad de la que se hará cargo la empresa hasta un máximo de 12 meses. Esta pensión cubrirá un 60% de la base reguladora los primeros 20 días y el 75% hasta llegado el año. Pero, ¿cuáles son los motivos reales para quedar incapacitado para trabajar?
Las razones más comunes de la incapacidad laboral
Una cosa es cierta: la incapacidad laboral puede afectar a cualquiera. A los jóvenes, a los artesanos y a los trabajadores de oficina. Sorprendentemente, las enfermedades reumáticas son las que más causan casos de incapacidad permanente, tal y como ha advertido la Sociedad Española de Reumatología (SER). También son la segunda causa de incapacidad temporal, solo después de los catarros comunes. Otras de las causas cada vez más comunes que causan incapacidad laboral son aquellas enfermedades relacionadas con la salud mental, como el agotamiento o la depresión. Especialmente el estrés y la tensión permanente tienen un efecto negativo a largo plazo en la psique. Otros motivos son el cáncer o los accidentes.
Identifica tu riesgo personal y tu capacidad de trabajo
¿Tienes una afición de alto riesgo, como el paracaidismo o el hockey sobre hielo, o enfermedades preexistentes? Estos factores aumentan el riesgo de invalidez repentina, por lo que debes declararlos a tu compañía de seguros. Pero ciertas profesiones también suponen un riesgo. Por lo tanto, asegurar tu propio trabajo es una obligación: solo tienes que saber el valor de tu trabajo. Basta con multiplicar tus ingresos anuales por los años que te faltan para jubilarte.
Nuestro consejo: Nuestros asesores financieros pueden ayudarte a determinar tu riesgo personal y calcular tu capacidad laboral. Para que tu medio de vida esté asegurado, independientemente de lo que te depare el futuro.
¿Ahorrar dinero como alternativa?
En lugar de pagar las cuotas mensuales del seguro, podrías apartar regularmente dinero en caso de invalidez. ¿No es así? Sin embargo, esto no suele ser rentable. Si te quedas incapacitado a esta edad, tendrías que vivir de tus ahorros privados hasta alcanzar la edad legal de jubilación, los 67 años. Si, por ejemplo, quieres pagarte a ti mismo 2.000 euros brutos al mes, tendrías que haber ahorrado 336.000 euros, sin incluir la inflación y las contribuciones fiscales. Por lo tanto, el seguro de incapacidad laboral también merece la pena en este caso y asegura tu existencia financiera y tu futuro.
1. Responde a las preguntas sobre tu salud con sinceridad
Para contratar el seguro de incapacidad laboral, tienes que responder a preguntas sobre tu estado de salud. Evita dar información incorrecta, pues de lo contrario podrías perder la cobertura del seguro y no recibir la pensión de incapacidad laboral.
2. Asegura una pensión de incapacidad laboral suficiente
La pensión de incapacidad laboral debe corresponder o basarse en tus últimos ingresos netos. Sin embargo, debes cubrir al menos el 75 % de tus ingresos netos o al menos 1.000 euros.
3. Terminar antes te ahorrará dinero
Cuanto antes se contrate el seguro, más bajas serán las primas mensuales. Además, la mayoría de los jóvenes profesionales no tienen ninguna o pocas enfermedades preexistentes, lo que da lugar a condiciones favorables.
4. Elige el periodo de seguro adecuado
El seguro profesional debe contratarse durante el periodo de tu actividad profesional, es decir, hasta los 65 o 67 años. A partir de los 67 años, deberías poder financiar su nivel de vida habitual con la jubilación legal y el plan de pensiones privado.