Somos todo oídos

Quien habla mucho -la mayoría de las veces- tiene conocimiento. Pero quien sabe escuchar demuestra que está dispuesto a seguir aprendiendo. Hay un gran valor detrás de estas palabras que definen la esencia interna de OVB.

Es verdad que somos líderes en nuestro mercado. Es verdad que la mayoría de nuestros consultores son licenciados o con máster.  Y también es cierto que tenemos acuerdos con los mejores partners de productos financieros y aseguradoras del país. Pero además de todo lo anterior, lo que es innegable es que nos diferenciamos de otras compañías del sector por saber escuchar a nuestros clientes. Este es el punto de partida para que toda la maquinaria de valor humano, conocimiento del producto, y la experiencia de los colaboradores, se ponga en marcha para trabajar teniendo siempre como horizonte claro la orientación de servicio al cliente.

Para poder ofrecer una asistencia íntegra, primero es necesario hacer un análisis íntegro también, que nos permita conocer cuáles son las necesidades de nuestro cliente y por qué ha solicitado nuestra ayuda. Nos convertimos en una especie de confidentes de sus asuntos financieros y usamos esta información para ofrecerles un producto o una combinación de productos que se adapten a lo que están buscando. Esto nos enorgullece grandemente y lo valoramos mucho, porque somos conscientes de que nos están confiando algo tan delicado como su patrimonio.

Lo que OVB hace es desarrollar una estrategia financiera que permite a las personas alcanzar sus metas y sueños, sin preocuparse por otra cosa más que vivirlos.