Invertir a corto plazo

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Siempre que tengas la capacidad para ahorrar una fracción de tus ingresos, te recomendamos invertirlo para combatir la inflación y la consecuente depreciación de tu dinero. 

En OVB recomendamos realizar inversiones a largo plazo y, a ser posible, comenzar a planificar tu jubilación. Sin embargo, hay clientes que nos preguntan sobre inversiones a corto plazo. Aunque no recomendamos este tipo de inversiones, queremos que entiendas a qué nos referimos cuando hablamos del corto plazo. 

 

¿Qué se consideran inversiones a corto plazo en OVB?

Las inversiones a corto plazo son proyectos de inversión que tienen un horizonte de tiempo de uno a tres años. Es decir, que la idea es que inviertas un dinero hoy y lo liquides dentro de ese periodo de tiempo con el objetivo de obtener rentabilidad y a la vez tener máxima flexibilidad.

Tener tu dinero en una cuenta bancaria sin ningún interés es regalar el dinero. Hay otras opciones: elige una cuenta remunerada o inversiones a corto plazo con intereses garantizados.

Este ahorro a corto plazo debe ser tu fondo de emergencia para imprevistos del día a día.. 

El medio plazo sería de 4 a 10  años y el largo plazo más de 10 años. Las rentabilidades siempre serán mayores y más seguras si inviertes a largo plazo. Haciendo eso, renuncias a parte de tus ingresos hoy pero esos ingresos serán mucho mayores a la larga. 

El corto plazo es lo contrario. Es la esperanza de conseguir ingresos en menos tiempo.. Aquí entran en juego las variables de riesgo y rentabilidad. 

 

Características de las inversiones a corto plazo

 

Liquidez

Cualquier inversión a corto plazo tiene que ser de gran liquidez. Es decir, que en el momento que decidas retirar tu capital invertido, puedas disponer de ello en cuestión de unos días. 

Riesgo

Cuanta más rentabilidad quieras sacarle a tus inversiones en un plazo corto, más riesgo tienes que estar dispuesto a asumir.

Muchos confunden las inversiones a corto plazo con la volatilidad. Puedes invertir en activos de poca volatilidad y riesgo a corto plazo, solo que la rentabilidad que puedas lograr es muy limitada. 

Tipos de inversiones a corto plazo

 

Renta fija a corto plazo

Consiste en invertir en bonos del estado o activos que te garanticen un interés concreto. 

Por ponerte un ejemplo, si tienes 10.000 € ahorrados y los depositas en un fondo de renta fija con un 1,5% de interés, dentro de un año habrás ganado 150 euros. Eso son menos de 15 euros al mes.

El interés en la renta fija depende de la calificación de la entidad en quien depositas tus ahorros. Cuanto peor calificación reciban más interés podrán darte. 

Renta variable a corto plazo

Consiste en invertir en renta variable, como por ejemplo acciones de bolsa. Antes de invertir no sabes cuánto vas a ganar o perder ya que tus ganancias dependen de la evolución del precio de esas acciones. Esta es una opción con mucho riesgo si piensas hacerlo a corto plazo.

Son recomendables las inversiones a corto plazo

Las inversiones a corto plazo suelen rendir pocos beneficios a no ser que conlleven un gran riesgo. En OVB te recomendaremos siempre tener una estrategia a largo plazo que evite inversiones en activos volátiles. 

Como hemos dicho, es posible invertir a corto plazo en renta fija y activos poco volátiles, pero el beneficio va a ser muy limitado. 

Un ahorro continuado en el tiempo te permite renunciar a créditos y pequeñas necesidades ya no te robarán el sueño. 

Te animamos a que mires lo más hacia el futuro que puedas.